42 Km en Bilbao 1.500 m+/1.500m- ultrarunnerdreams
Sueños de un corredor de carreras de ultra distancia.
Atletismo, Cross Country, Trail, Ultra Distancia, carreras de montaña, material, entrenamientos, sueños, crónicas de las principales carreras, opiniones, hidratación, nutrición deportiva
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42 Km en Bilbao 1.500 m+/1.500m-

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42 Km en Bilbao 1.500 m+/1.500m-

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Foto Copyright HokaOneOne – EVO MAFATE 2
Tras un sábado intenso, el domingo tenía planificado un entrenamiento de 4 horas largas. La cena del sábado se alargó, básicamente porque cuando estás tan a gusto entre amigos el tiempo pasa muy deprisa. A los deportistas, otra cosa no, pero hablar, hablamos hasta por los codos. Si a esto le sumamos: mundial de Doha, europeo de Glasgow, Fernando Carro y Sergio Pérez la charla puede dar para días.

Habitualmente este tipo de entrenamientos los suelo hacer a primera hora, acostumbro a levantarme a las 05:50 AM y para las 06:30 AM ya estoy comenzando el entrenamiento. Para poder hacer un entrenamiento a tope es mejor salir descansado así que en esta ocasión la hora de inicio ha sido las 11:00 AM. Esas horas han sido suficientes para poder descansar y salir a tope.

El domingo a esa hora en Bilbao llovía a mares. No se veía la acera, era todo un charco único. Lo bueno es que con ese tiempo te encuentras poca gente por la calle y se puede correr con más tranquilidad. Últimamente correr a estas horas por Bilbao un domingo se convierte en una auténtica yincana. El domingo fue de esos días que sales de casa con la chaqueta de agua, con el gorro puesto desde el inicio y que no te lo quitas hasta que te metes a la ducha, incluso alguna vez te metes incluso vestido. Después de tantas horas mojado la verdad que te da lo mismo.

La temperatura estaba entorno a lo 11 grados centígrados. No es frío, pero si el suficiente para tener un susto si no tienes cuidado. En un día como el que hacía el domingo, no puede falta una gorra (para quitar el agua de la cara) y unos guantes. Una buena opción es llevar unos guantes calientes y por encima unas manoplas, si puede ser de Gore-Tex mejor. Cuando tienes que comer, te quitas la manopla y listo, el resto del tiempo estás seco. El uso de manoplas se complica bastante, sí usas palos y en especial si usas las dragoneras de LEKI.

En días como el domingo, los pies se van a mojar desde el primer minuto que comiences a entrenar, así que mi recomendación es que te hagas con unos buenos calcetines que funcionen bien con mucha agua y te olvides de unas zapatillas con membrana que lo único puede provocar es que el agua no pueda salir. El resultado será que los charcos los tendrás dentro de la zapatilla en lugar de en el monte.

¿Pero cómo se afronta un entreno de casi 5 horas donde sabes positivamente que no va a parar de llover? Pues mal. ¿Entonces por qué lo hago?

  1. Tengo la suerte de poder hacerlo.
  2. Me encanta correr por la montaña.
  3. Si quieres disfrutar de muchas horas corriendo a través de nuevas montañas, es necesario entrenar y preparar el cuerpo para los retos futuros. 
El primer tramo hasta el Pagasarri sale muy rápido. Está claro que el hecho de estarte calando por arriba y por abajo hace que vayas más rápido. Estos días, son muy complicados para comer y beber. Debemos tener mucho cuidado y no olvidarnos de comer, aunque tengas que pararte con todo lo que llueve y lo poco que te apetece. Si no comes no andas. No nos olvidemos tampoco de beber ya que a pesar del frío, por la humedad, vamos perdiendo mucha agua.

Sigo para el Ganekogorta, con un poco miedo al frío que va a hacer en la subida. El primer repecho es muy duro pero está protegido del viento hasta que sales al collado. En cuanto asomo la cabeza en el collado, se inicia el fuerte viento que no deja de golpearme hasta descender de la cima por su ladera sur. El viento sopla muy fuerte de mar y no hay nada que te proteja en la subida, te lo comes todo y solo cesará cuando bajas por la otra vertiente. 

El viento ha sido muy fuerte y la sensación de frío ha sido muy alta. La bajada hacia el collado que nos va a llevar a la fuente del Espino es muy delicada, con tanta agua. Nada más iniciar la bajada, me he distraído y he pisado de talón. Resultado: culada  y susto importante. Afortunadamente ha sido en la parte de hierba.

En la bajada he tenido que andar muy fino para no liarla, aunque contaba como aliado a las HOKKA MAFATE EVO 2, una auténtica maravilla de zapatilla. Tremendas lo bien que van, tremendas. En. La fuente del Espino, primer avituallamiento. Buen sitio para aprovechar a beber, tomar un gel y una barrita de TRIFORZA.

De la fuente, hasta el collado de Pastorenkorta para a continuación, bajar al parque de Montefuerte que se encuentra próximo a la Peña. Aquí segundo avituallamiento, de nuevo beber, gel de Infisport y una barrita de chocolate blanco de Infinisport. Ahora toca subir hasta el aparcamiento del Pagasarri y lo hacemos por el barrio de Buya a través de un paraíso natural (el barranco del Bolintxu). Esta subida, es una auténtica maravilla y te da la sensación que estas a miles de kilómetros de cualquier gran centro urbano y sin embargo estás a nada de Bilbao. Es una lástima que la Diputación Foral de Bizkaia haya optado por hacer un viaducto en mitad de este entorno natural, en lugar de defenderlo y declararlo espacio protegido. Esto es una realidad que vamos a vivir los bilbaínos en pocos meses. Luego sacarán pecho como defensores del medio ambiente pero la realidad es que van a destruir un espacio natural simplemente atendiendo a intereses totalmente económicos y partidistas.

Una vez que llegas al aparcamiento del Pagasarri, ya es todo bajar hasta casa. Por lo menos casi todo, porque por el camino, todavía tenemos que guardar fuerzas para algún que otro repecho bastante fuerte. 

Por fin en casa, no ha parado de llover en las 4 horas 35 minutos que me ha llevado recorrer los 42 Km con un desnivel acumulado positivo de 1500 metros un desnivel negativo de 1.532 metros. Cuando llegas a casa la ducha caliente te hace olvidar, el frío que has pasado y solo queda la alegría de poder haber sacado adelante un entrenamiento que a primera hora inicie sin ninguna gana.

Un abrazo
Aitor





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