BILBAO MOUNTAIN MARATHON 2021 – La Crónica

18 Nov BILBAO MOUNTAIN MARATHON 2021 – La Crónica

Introducción

Por fin, tenemos un maratón de montaña en Bilbao. Ya iba siendo hora de que alguien tuviera la valentía para poder lidiar con los problemas administrativos, económicos y jurídicos que supone la organización de un evento de esta magnitud.

Bilbao tiene unas enormes posibilidades para hacer una gran carrera de montaña. Por supuesto no va a ser la que más desnivel positivo acumule, ni la prueba más técnica dentro del calendario de carreras de montaña. Bilbao tiene un potencial enorme para poder organizar una carrera de ultra distancia que salga de zonas de Bilbao como Rekalde, Deusto o Zurbarán o incluso desde el mismo Abandoibarra junto a la ría del Nervión sin tener que suponer una afección al tráfico de la ciudad.

Salida y llegada en Bilbao aprovechando toda la infraestructura hotelera y de restauración de la ciudad. Un evento que puede contar con varias distancias y que pueda concentrar durante 3 días (de viernes a domingo) toda la atención del mundo del Trail en Bilbao.

De momento ya se ha dado el primer paso, a cargo de los organizadores de la Bilbao Mountain Maratón. Con salida y llegada en el Rekalde (Bilbao) han organizado tres carreras: 13 Km, 21 Km y 42 Km que es una pequeña muestra del potencial que tiene Bilbao para futuras ediciones:

• Maratón terminaron 89 participantes 4 abandonos
• Media terminaron 195 participantes 1 abandono 
• 13 Km terminaron 153 participantes 8 abandonos

En total 437 participantes tomaron la salida el 13 de noviembre desde las 9:00 AM.

El Recorrido

La pandemia del COVID 19 sigue presente en la sociedad. Su parte más visible son las mascarillas que aun es obligatorio su uso en el transporte, en los centros de trabajo, en los hospitales, en las tiendas y por su puesto en los locales de ocio y de restauración. La parte menos visible es la de la cantidad de fallecidos que ha producido esta pandemia y de afectados que sufrirán patologías respiratorias y psicomotrices para el resto de sus vidas. Actualmente la sociedad se ha relajado mucho y de nuevo el número de contagios ha aumentado, lo que obligará a las administraciones a volver a tomar medidas.

Medidas como las que se tuvieron que tomar ese 14 de marzo de 2.020 cuando el gobierno central decreto el estado de alarma y el confinamiento obligatorio a todos los ciudadanos. Confinamiento que no termino hasta el 21 de junio, tras permanecer en casa 98 días confinados, tal y como contaba en el post Canfranc-Canfranc 100K – Crónica de un Sueño

Tras el confinamiento en Bilbao no se podía salir a correr si no lo hacías con la mascarilla puesta en todo momento y tan solo si estabas en el monte solo podías hacer ejercicio sin mascarilla. Así es como empecé de nuevo a entrenar: caminando con la mascarilla hasta llegar al monte y una vez allí quitártela hasta que te cruzarás con alguien. A todo esto, se le sumaba el confinamiento primero autonómico, luego provincial y al final municipal.

Así que toco ser imaginativo para diseñar unos itinerarios en los que pudieran acumular kilómetros y desnivel de para a preparar especialmente los retos de 2021. Afortunadamente el Ayuntamiento de Bilbao ya había diseñado en años anteriores unos recorridos con el objetivo de poder dar la vuelta a Bilbao, recorriendo los montes que lo rodean, en lo que se conoce como el “Anillo Verde de Bilbao – El Gran Recorrido de Bilbao (GR 228)”. Es un recorrido circular de 38.1 Km con 1.415 m+ que la entidad municipal recomienda hacerlo en 2 etapas, cuando este se realiza andando: En este enlace se puede obtener más información: https://www.bilbao.eus/cs/Satellite?cid=3000076722&language=en&pagename=Bilbaonet%2FPage%2FBIO_contenidoFinal

Tomando como referencia este trazado, se le pueden sumar tantos trazados, desnivel o kilómetros como quieras en función del tipo de entrenamiento y el objetivo que busques con el. Podemos diseñar itinerarios muy rápidos que discurren en su mayor parte por pistas o con desniveles donde se hace imposible subir corriendo y hasta en algunos casos bajarlos corriendo.

El recorrido propuesto por los organizadores de la BMM a pesar de ser un itinerario muy lógico, seguramente yo no lo habría considerado si no llega a haber sido por esta carrera. La parte inicial del recorrido de los 42 Km es conocido, aunque en otro orden y sentido. La parte final es totalmente nueva para mí, Nunca me había planteado la posibilidad de bajar hasta casi Alonsotegi para de nuevo volver a subir hasta Arraiz. Ahora que conozco esta nueva parte seguro que lo añado a alguno de los entrenamientos tipo que tengo diseñados.

El itinerario diseñado por los organizadores de la Bilbao Mountain Marathón (BMM) quizás tenga demasiada pista. Es cierto que algo de esa pista quizás se podría haber sustituido por algún sendero más técnico. Pero para una primera edición y con una prueba que está comenzando, la organización no se puede arriesgar y debe apostar por la seguridad en lugar de por la dificultad.

Una muestra de esto es el bajo porcentaje de abandonos de esta carrera a pesar de sus 2.568 metros de desnivel positivo que marcaba mi Garmin FENIX 5X Plus al cruzar la línea de meta.

Un itinerario muy exigente donde si aprietas demasiado bajando, puede que no tengas piernas para luego volver a subir o parar correr en aquellas partes que se puede correr mucho.

La carrera

Justo a la hora de recoger el dorsal me encuentro con Javier Trebolazabala «Boli» compañero de TECNIRUNNER con el que intercambio las típicas bromas estúpidas de corredores minutos antes de salir. Los nervios ya han comenzado y estos momentos la cabeza no está para mantener conversaciones más profundas. Le veo muy fino y en forma. Viene de hacer una gran temporada 2021 y yo creo que lo va a hacer muy bien, le veo con muchas ganas y seguro que va a fuego. Ni me planteó ir con él. Cada cual debe saber donde está y como se plantea su carrera.

Todavía es temprano y no vamos a un BERTIZ que conocemos cercano a tomar un café solo y de paso a poner el dorsal. Una vez más y ya van un millón de ellas, Ainhoa me acompaña a la salida de una prueba. Los minutos antes poderlo pasar tranquilamente charlando con la gente que te quiere es algo que no tiene precio. Luego ella volverá a casa y no me esperará en la llegada, básicamente, porque no sé cuando llegaré a la meta. Lo único que sé es que será más tarde de la hora de comer.

La bolsa del corredor es muy completa: calcetines, camiseta, manguitos, unos caramelitos y hasta una bolsa para hacer la compra. Increíble lo que se puede hacer con el dinero, cuando es más importante que los corredores estén a gusto que el organizador de turno se haga de oro. Agradecer nuevamente a los organizadores el espectacular trato a los corredores.

Ya son las 8:50 y nos acercamos a la línea de salida. En ella, me encuentro con Axier Vivanco de mi club Amurrio Trail Taldea. Axier esta muy fuerte y no me queda duda que va a ir a tope, una distancia perfecta para él. Seguro que lo hace de maravilla.

Mi estrategia de carrera es muy simple: disfrutar del paisaje, disfrutar de la gente y seguir aprendiendo de mi cuerpo y del material que mejor se ajusta a mi forma de correr y de entender las carreras de montaña. Justo hace 7 días había hecho el itinerario de la carrera saliendo de casa. Un entreno que finalizó tras 56 kilómetros, 8 horas 47 minutos y 2.442 m+. Puede parecer un poco excesivo meter este entrenamiento a falta de 7 días de la carrera, pero eso define un poco mi planteamiento de carrera para este sábado. Mí único objetivo es seguir acumulando kilómetros y experiencia. No me importa ser rápido, me interesa ser eficiente y solido, tanto muscularmente como psicológicamente.

Hace menos de 3 semanas tuve una caída muy fea al resbalarme en unas escaleras muy resbaladizas debido a la lluvia. Todavía tengo muy tocados las lumbares y el piramidal. El dolor es bastante intenso, aunque soportable siempre y cuando no me flipe mucho bajando. El dedo pequeño de la mano derecha no está recuperando al ritmo que debería, pero me dejar sujetar el bastón sin demasiados dolores. Lo que tengo muy claro es que no me voy a arriesgar a una caída y a liarla más.

Siento que es mi obligación participar en esta prueba y apoyar a una organización que ha tenido la gran valentía de hacer posible en Bilbao el primer maratón de montaña. Esta primera edición no me lo quiero perder, aunque físicamente no esté al 100% pero no siempre se puede estar a tope y hay que aprender a gestionar los recursos con los que contamos en cada momento. 

Muy importante remarcar: para esta carrera no me he tomado, ningún IBUPROFENO, PARACETAMOL, NOLOTIL o cualquier otro tipo de medicamento para paliar el dolor. Si antes de salir, necesitas tomar algo para el dolor NUNCA DEBES CORRER.  

Si no puedes soportar el dolor, te debes quedar en casa.

A las 9:00 AM se da puntualmente la salida. Salgo muy rápido. Me cuesta mucho frenar las piernas y dejar que me pasen el resto de los participantes. Yo voy muy metido en lo mío y poco a poco. Tras una fuerte subida en asfalto, nos metemos por fin en el bosque y tras unos metros donde encontramos bastante barro, cogemos la pista de grava que nos lleva hasta Arraiz. La gran mayoría de los participantes suben andando, yo lo hago corriendo. Subo un poco más rápido andando, pero empleando más pulsaciones y gastando más energía, así que no paro de correr. Hacia la mitad de la subida, me pasa Javi. Durante unos segundos pienso en engancharme a él, pero prefiero seguir con el plan.

Llego a Arraiz muy fácil, el tramo de enlace hasta iniciar la subida a Arrastaleku tiene un único repecho, el resto es bastante llano por camino muy sencillo. Al inicio de Arrastaleku saco los palos y comienzo a subir a ritmo. La subida la he hecho muchas veces entrenando y le tengo muy cogida la medida. Los desniveles de esta subida son igual de espectaculares que las vistas que se tiene de Bilbao.

No se hace la subida completa de Arrastaleku. En la parte final, se gira a la derecha y se coge la pista que tras unos metros se vuelve a dejar a la izquierda para terminar de llegar al buzón de Arrastaleku. Ahora toca los toboganes hasta Ganeta (685 m).

Tras una fuerte bajada, llego al refugio del Pagasarri (671 m) y tras una corta subida alcanzamos su cima. Tras 2 bajadas fuertes y delicadas llego al collado de Pasterenkorta. A partir de este punto, tomamos una pista de grava perfecta para correr si tienes piernas. La organización tiene montado un avituallamiento que paso de largo. Estamos aún en el kilómetro 8,3 de carrera y todavía el gasto ha sido poco.

Desde este collado bajaremos hasta el parking del Pagasarri (Igertu), pero antes tenemos que recorrer un tramo que parece que es más llano de lo que realmente es en realidad. El tramo comienza con una bajada muy fuerte que nos lleva a un tramo más llano para en su parte final volver a ascender hasta alcanzar la pista que baja directamente desde el refugio del Pagasarri. Una vez llegado a este punto, todo es bajada hasta el parking del Pagasarri (Igertu)

En este punto cogemos la pista que nos conduce a Arnoteguí (428 m). El inicio comienza con una fuerte subida que aprovecho para tomar un gel. Cuando he llegado a la altura de la barrera, ya lo he terminado y ya puedo comenzar a correr. La pista es perfecta para correr, a pesar de su tendencia ascendente, se puede hacer totalmente corriendo. En esta prueba no se llega a la cima de Arnotegui que se deja a la izquierda, sino a un collado previo desde el que se inicia una fuerte bajada hasta Buia.

El inicio de la bajada se realiza por el mismo tipo de pista por la que hemos venido hasta desviarnos a la izquierda para coger un single track que poco a poco comienza a tener un desnivel bastante fuerte. Esta senda era el camino tradicional de subida al Arnoteguí desde Buia antes de hacer la pista por la que hemos estado corriendo hasta este momento.

Una vez llegado al final de la bajada nos encontramos en uno de los puntos más bajos de la prueba. Para mí es uno de los puntos más especiales y mágicos que tenemos cerca de Bilbao. Tras un breve avituallamiento, iniciamos el recorrido por el valle del Bolintxu junto al cauce del arroyo que nace en la vertiente norte del Pagasarri y desemboca en el río Nervión a la altura de la Peña y tiene un recorrido de unos 5 kilómetros.

La carrera en lugar de tomar el camino cercano al cauce y que en algunos momentos se confunde con el propio cauce del arroyo, toma otro que nos obliga a ir un poco más altos y de alguna manera nos impide disfrutar de este valle en toda su grandeza. Una auténtica pena. Os recomiendo que volváis otro día en familia y que disfrutéis del entorno natural que se crea a los pies del propio arroyo.

De pronto un ruido de maquinaria pesada perturba nuestra paz, parece como si estuviera sobre nuestra cabeza y realmente lo están. Son unas enormes grúas que están comenzando a montar la estructuras que soportarán un viaducto que sobrevolará el valle, conectando la autopista de peaje denominada “Súper Sur” con la autopista AP-68 también conocida como Vasco-Aragonesa o la autopista del Ebro.  Los que amamos este lugar hemos mostrado nuestra preocupación por el impacto ecológico de la actuación. La administración a través de la Diputación Foral de Bizkaia ha diseñado y supervisado un proyecto de ejecución que esperemos que a su finalización podamos confirmar que ha sido eco-sostenible y ha respetado un entorno de un valor ecológico muy importante.

Justo en este punto nos encontramos con la presa del Bolintxu, donde en esta época del año podemos contemplar su cascada. Impresionante escenario. Casi sin darnos cuenta salimos a un gran claro donde en 1968 el Consorcio de aguas de Bilbao construyó una tubería de hormigón en el centro del valle a una altura de 20 m por donde se transporta el agua que se capta del Zadorra, en Álava. La citada tubería se puede apreciar a la derecha de los tuneles escavados para conectar la Super Sur.

Tras unos breves metros ya comenzamos de nuevo a subir. Enseguida sobrepasamos la primera barrera de madera que marca la subida. A mano derecha podemos ver un conjunto de cascadas muy interesantes y a la izquierda se ve el monte Erdiko Atxa (273 m).  Seguimos la pista hasta ponernos casi paralelos a las paredes del Erdiko Atxa y tomamos una senda que gira a la izquierda. Esta concluye en una fuente donde hay dos pilones muy diferenciados, uno para refrescarse y otro para fregar.

Me detengo a beber agua fresca y a tomar un gel en Antsolako-Iturria. Hemos llegado a la cima del Antsola (305 m). Seguimos la senda que va sobre la antigua cantera de Artxondo y no conduce a unas enormes pistas construidas por Cementos Rezola para verter residuos inertes desde la parte alta de la antigua cantera de Bolintxu.

Subimos por la pista de subida al Pagasarri desde el barrio de Gorriko hasta llegar a una zona más horizontal de la pista donde encontramos un poste direccional que nos sirve de referencia para tomar la directa a la pequeña cumbre de Larrako. Antes había una alambrada que marcaba el inicio, ahora las últimas voladuras han eliminado cualquier tipo de poste que pudiera marcar la subida. Intentamos subir a la derecha alejados de la cantera. La subida es muy fuerte y gracias a que esta ya pisada no se hace especialmente difícil su ascenso. Una vez en la cima de Larrako (474 m) continuamos hacia su vertiente opuesta, en unos pocos minutos y por senda marcada llegamos aun cierre (hoy abierto por la carrera) tras la cual está la fuente de Txus y unos metros más adelante el avituallamiento del collado del Pastorekorta.

Tras reponer liquido en el avituallamiento seguimos a por nuestro próximo objetivo: Ganekondo (627 m). Para alcanzarlo solo tenemos que seguir una pista de grava.  Es una pista que poco a poco va ganando altura hasta llegar al cruce donde confluyen la pista que viene desde el Pagasarri, la que viene desde Llodio y la que viene desde Alonsotegui. La pista por la que hemos venido, hacia la mitad, presenta una zona con piedra muy grande que para subir no afecta pero que si se recorre la pista en sentido contario puede llegar a seguir complicada, especialmente con agua.

En el mismo cruce, tenemos un avituallamiento líquido donde aprovecho a tomar un vaso de agua y una pastilla de sales. Tomamos un camino que sale a la izquierda. En pocos metros y tras superar una pequeña rampa nos conduce a la cima del Ganekondo (627 m). De la cima, una ligera bajada y enlazamos como la pista que baja hasta Miravalles. Justo en este punto, comienza una de las subidas al Ganekogorta (999 m). Pero en esta ocasión, pasamos de largo y tomamos la pista dirección Miravalles.  En unos metros dejamos la pista y tomamos una senda que sale a la derecha. La primera parte hasta el refugio de Arrankuko Etxola el camino es ascendente, a partir de este punto es más llano, pero más estrecho. Es un sitio perfecto para guarda los palos y disfrutar del camino. Este trozo de la carrera es espectacular y nos conduce kilómetro a kilómetro hasta la fuente del Espino. Un lugar mágico donde siempre paro, unas veces a comer y a beber o como en esta ocasión, solo a beber un poco de agua fresca. Un lugar perfecto para tomar un gel antes de acometer la ascensión al Ganekogorta (999 m). 

Es una subida que conozco muy bien y que generalmente suelo hacerla de bajada en lugar de subida. Es muy dura pero técnicamente no presenta ninguna dificultad. Si la hacemos de bajada hay un par de puntos donde tenemos que extremar las precauciones porque el terreno es muy resbaladizo, especialmente en días de lluvia.  En seguida, superamos la parte más dura de la subida que nos conduce a una planicie ascendente pero bastante cómoda. Esta zona con niebla es complicada. La niebla lo cubre todo, pero es una zona que casi la puedo hacer de memoria. Tomamos la senda que ya nos conduce hasta el collado. Es una zona descompuesta que de bajada hay que gestionarla con cuidado. Del collado a la cima, ya no hay nada.  Como es habitual en esta cima, la niebla lo invade todo y aunque no es fácil perder el camino hay que estar atento..

Conozco la bajada muy bien y bajo con mucha precaución. Mi mano no se puede permitir otra caída. El dedo pequeño de la mano derecha no termina de mejorar desde la caída, parece que va a peor. Duele, pero el dolor a la hora de tirar de palos es soportable pero no me puedo cae así que poco a poco. Me fastidia tener que bajar tan lento, cuando habitualmente vuelo sobre el barro, pero esta vez no puede ser y bastante suerte tengo con poder estar hoy corriendo.

Por fin, llego al final de la bajada del Ganekogorta. Muy tenso, por tener que retener tanto. De nuevo estoy en la pista y a pocos metros se encuentra el mismo avituallamiento que antes cogimos de subida. En este punto coincido de nuevo con Gregorio López Gonzalo (Goyo) con el que he coincidido muchas veces a lo largo de la carrera y a partir de este momento vamos los dos juntos.

Tomamos la pista que baja hacia Alonsotegui y seguimos con buen ritmo. Tras unos minutos bajando, tomamos una pista que sale a nuestra derecha. De nuevo toca seguir bajando. La bajada es muy cómoda, se hace un poco pesada pero cómoda. Llegado un momento de la bajada tomamos una pista a la derecha que nos conducirá a mismo cordal que esta mañana hemos recorrido de subida hacia la cima de Arrastaleku. El punto es significativo y los postes del gas marcan nuestro itinerario. La bajada es más dura de los que parece y tiene dos tramos especialmente delicados en los que debemos tener especial cuidado. Llegamos al vertedero de Artigas. Voy perfecto de piernas y de fuerzas. La bajada la hemos hecho tranquilos y sin machacar especialmente el cuerpo.

En. la misma puerta de las instalaciones, sale una carretera hacia arriba y en unos metros llegamos a la valla que nos dará acceso a Arraiz. Allí mismo hay un avituallamiento donde bebemos y charlamos tranquilamente con los voluntarios. No tengo ninguna prisa, el tiempo es lo de menos hoy en esta prueba. Antes de comenzar la subida tenemos que rodear la montaña hacia la izquierda hasta llegar a la incineradora de Zabalgarbi, S.A. En este punto comienza nuestra última subida, Goyo tira fuerte para arriba. Tenemos ganas de llegar a la parte más alta cuanto antes y eso se nota en el ritmo. La subida es muy fuerte pero afortunadamente no es muy larga. Tras una parte inicial muy dura, se suaviza mucho. La pista nos deja a pocos metros de los merenderos de Arraiz.

Ya solo nos queda descender hasta la plaza de Rekalde. Goyo prefiere bajar un poco más suave y yo sigo al mismo ritmo que he seguido a lo largo de toda la prueba. La bajada final por el bosque la disfruto mucho. El ritmo no es alto, pero si disfruto mucho. Rápidamente alcanzo la carretera. Esta vez, en lugar de seguir descendiendo por esta, la organización con buen criterio ha decidido que bajemos por un camino peatonal que podría haber sido una buena alternativa de subida.

Al llegar a Rekalde, los voluntarios me cortan el tráfico y me indican perfectamente el camino a seguir. Los últimos metros son lisos y los disfruto al máximo. Tal y como me encontraba físicamente y con la cantidad de kilómetros que llevo este año en las piernas no tenía nada claro poder terminar esta prueba dentro de los tiempos de corte.

El haber realizado el itinerario completo hace 7 días, me ha ayudado mucho a la hora de gestionar los ritmos. Llego a la meta de esta prueba en 6 horas 9 minutos. Antes os habría dicho: “que pena no haber apretado un poco más y haber bajado de las 6 horas”. ¿Habría sido posible bajar de las 6 horas? Pues, seguramente si. Quien sabe y a quien le importa bajar de las 6 horas. Al menos a mí no. 

Priorizo poder correr en compañía de otros participantes que llegar antes a la meta y haber estado corriendo toda la prueba en solitario.

Para correr solo ya están los entrenamientos.

Si actualmente me pongo un dorsal, en parte es poder compartir kilómetros con otros participantes. 

Conclusiones

Carrera 100% recomendable. La complejidad técnica de la prueba es baja. Los 2.500 m+ de estos 42 Km requiere de una preparación física adecuada. Por fin, un maratón de montaña en Bilbao.

Bilbao tiene muchas posibilidades de cara a poder organizar carreras de montaña y cuenta con 4 alicientes principales:

1. Tus acompañantes pueden disfrutar de Bilbao: de su gastronomía, de sus museos, de sus paseos y de sus gentes, mientras tu están realizando la actividad de montaña que te apasiona y luego te puedes sumar a ellos al final de la prueba.
2. El impacto en la circulación y en la ciudad es mínimo. A diferencia de carreras de asfalto que suponen afecciones muy importantes de tráfico.
3. Desde el punto de vista de la seguridad. Al estar corriendo siempre por los montes cercanos a Bilbao o por municipios cercanos, la evacuación de cualquier participante que requiera atención médica es muy rápida.
4. Es posible enlazar montaña, mar, playa y Bilbao en una única carrera. Algo que ya se lo está planteando el consorcio UTMB para NIZA.

Para terminar, dar las gracias a todos los voluntarios y los organizadores de esta prueba por haberme hecho disfrutar de esta mañana de sábado recorriendo los montes de casa.